Esta semana siguiendo con la aproximación L he comenzado a acotar un poco más el ámbito de actuación del proyecto. Para ello he comenzado a definir los solares susceptibles de ser utilizados y los que podríamos mantener. uniéndolos se plantea crear una super manzana sobre la que se colocará el futuro edificio u edificios.
Una vez planteada la manzana se procede a dividir en franjas horizontales, como traslación de las verticales de las fachadas propuestas al rededor. Estas franjas responderán a una programación especifica cada una, todavía sin determinar al 100%. Lo que sí se propopone es, como aparece en el diagrama, una atomización de programas básicos que uniendose entre ellos puedan generar programas más complejos, que , además sean capaces de superponerse entre ellos, haciendo que varias franjas programáticas sean capaces de pertenecer a dos o más programas superiores.
El uso de estas bandas provocará una estrategia arquitectónica concreta. Consistente en la adesión de prismas que alberguen los diferentes programas. Como elemento de rotura de la trama tan paralela y pensando en la necesidad de comunicación entre las bandas, se ha pensado en unirlas todas mediante un programa especifico común, cristalizado en una rampa de conexión que albergaría en su ser un mercado flores.
Avanzando en el tema de las fachadas, se propone un esponjamiento de estas. las fachadas originales las derribaríamos para colocar elementos transparentes o traslucidos que conectarían con unas terrazas de nueva construcción, como ampliación de las vivendas. y cubiertas por las nuevas fachadas que mantendrían la geometría de las fachadas antiguas pero con el nuevo sistema de muro vegetal fasciculado.
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